‘El Arte de la Encuadernación del Libro en Cataluña y Europa’ – Lluís Domenech i...
[Barcelona Eventos / Cultura – Encuadernación]
Hotel Casa Fuster, Barcelona
Prersentación ‘El Arte de la Encuadernación del Libro en Cataluña y Europa’
23 de abril de 2018
La exposición ‘El Arte de la Encuadernación del Libro en Cataluña y Europa’, realizada por Norberto León director de ‘Patrons Press’ en colaboración con el Hotel Casa Fuster de Barcelona, se encuentra ubicada en el ‘Café Vienés’ de dicho hotel. Con motivo de la presentación de la exposición se ha llevado a cabo una mesa redonda en torno a la encuadernación.
El director del hotel, Joan Carles Casanova, ha dado la bienvenida a los asistentes expresando su satisfacción por la celebración de este acto. “La Casa Fuster ha tenido y tiene una especial vinculación con el mundo de la cultura, recordemos que en 1933 se inauguró este local con el nombre de ‘Café Vienés’, nombre con el que sigue, como un lugar de encuentros artísticos y tertulias literarias.
Nos gusta organizar actos que tengan un vínculo especial con la cultura. César Royo, subdirector y RRPP de hotel, ha sido el iniciador y el artífice de organizar eventos que homenajean el mundo de la cultura y la literatura. Hoy, ‘Día del Libro’, se habla mucho de autores y contenidos, pero nadie habla de la encuadernación, algo tan importante como es ser el primer punto de contacto con el lector.
Tenemos en la mesa a Josep Cambras, artista encuadernador y una de las personas que más sabe de encuadernación, además es coleccionista y tiene piezas de un enorme valor. Nos pareció que debíamos contar con su conocimiento y que nos pudiera mostrar algunas de las piezas de su colección de libros. Nos explicará un poco la historia de la encuadernación.
Está con nosotros también Carles Sàinz, historiador y presidente del Centre d’Estudis Lluís Domènech i Montaner, que hará una parada en el modernismo, y nos hablará de Lluis Domenech i Montaner, como no podía ser de otra manera estando en esta casa, del que pocas personas saben que tuvo una época de encuadernador.
Siempre se habla de su vertiente de arquitecto y aquí destacamos los pocos años en los que se hizo cargo de la editorial familiar y en los que diseñó la encuadernación de muchos libros”.
Josep Cambras, es Artista Encuadernador y profesor en la Escuela de Artes y Oficios de la Diputación de Barcelona desde 1985. Su obra figura en las más importantes bibliotecas privadas de Europa y entidades públicas como la Biblioteca de Catalunya, la Biblioteca Nacional de Madrid o el Archivo de la Corona de Aragón.
Cambras, que además de ser la encuadernación su profesión, es su pasión, nos introduce en su historia. Nos habla de la tradición mudéjar, de la importación de modelos extranjeros como los de Italia y Francia, siendo las tendencias italianas las que destacaron en Barcelona y Aragón.
“Las encuadernaciones en pergamino eran pintadas a mano y por esta razón muchas se han perdido. En el siglo XVI para proteger los textos se revestían con madera, piel o tejidos nobles. En este mismo siglo aparecen las encuadernaciones renacentistas de origen italiano y los hierros con motivos decorativos. En Francia Jean Grolier desarrolla un estilo ornamental único y de los más copiados del mundo.
Encuadernación estilo Dentelle- Imágenes gentileza de Josep Cambras
En el siglo XVII continúa la encuadernación al estilo grolier con ciertas modificaciones, hierros puntillados en Francia que también se utilizan en España en los siglos XVII y XVIII donde aparece el estilo de abanico
En el siglo XIX vemos el estilo cortina y se acaba la encuadernación manual y aparece la encuadernación mecánica e industrial. Hermenegildo Miralles, impresor y encuadernador, innova completamente y en todos los aspectos la imprenta. Pasa a realizar una producción integral y trabaja en artes gráficas, fotografía, litografía… La casa Montaner y Simón encuaderna para ellos.
En este mismo siglo la decoración era ecléctica y a partir de la mitad del XIX se personaliza. A principios del siglo XX se establece el principio de armonía entre la decoración y el alma del libro. El encuadernador colabora con pintores e ilustradores. Pierre-Émile Legrain dice: ‘la encuadernación es el frontispiscio que resume el alma de un libro y nos prepara para su lectura. Una encuadernación no ha de evocar la flor sino la esencia de su perfume’”.
Carles Sàinz, es historiador, docente y editor. Licenciado en Historia por la Universitat de Barcelona, profesor de historia de la UNED Barcelona, coordinador del Centre d’Extensió Universitària UNED en Canet de Mar y presidente del Centre d’Estudis Lluís Domènech i Montaner.
Sàiz nos explica que Lluís Domenech i Montaner además de arquitecto, político, historiador e historiador de arte, editor y promotor, dejó huella en la modernización del sector editorial en la Barcelona del siglo XIX. La aportación de Domenech en este campo fue de una dimensión enorme.
“El padre de Lluìs, Pere Domenech i Saló, fundó a mediados del siglo XIX un taller de encuadernación artesanal de libros de lujo y también importaba y comercializaba maquinaria para otros talleres.
Él estaba destinado a continuar el taller familiar pero cuando acabó la carrera de Ciencias Exactas, Físicas y Naturales, decidió trasladarse a Madrid para hacer Ingeniería y se matriculó en la Escuela de Arquitectura de San Fernando. 1873 fue un mal año para la familia, su hermano mayor fallece y unos meses después lo hace su padre.
Tiene que ponerse al mando de negocio familiar. Sus tres hermanos eran menores que él y habría que esperar 2-3 años para que se pudieran ir incorporando al taller. Con el tiempo le gusta más el mundo de la encuadernación y cuando dos de sus hermanos se hacen cargo del negocio, él continúa vinculado en el mismo realizando algunos proyectos de encuadernación.
A finales del XIX la técnica de las artes gráficas entra en una renovación total. Aparecen grandes profesionales que se dedican al negocio del grabado (como Marià Fuster, el primer dueño de la Casa Fuster). Los hermanos Domenech crean, junto con un impresor de calidad: Celestí Verdaguer, la biblioteca (colección) ‘Arte y Letras’. Esta colección ilustrada profusamente elevó el nivel de estas colecciones. ‘Arte y Letras’ se hace con mucho cuidado, con estilo parecido pero cada cubierta es distinta, es una obra artística, el arte por el arte, con presentación, papel, impresión, tapas y cubiertas de alta calidad.
Es un esteticismo que da pie al libro modernista. Todos los libros están encuadernados con tela impresa con muchos dorados, encofrados, los cortes de papel están todos decorados con motivos árabes o mudéjar y todos diferentes. Es una obra muy cuidada que ha acabado siendo obra de coleccionista. Se repetía la misma guarda, una especie de ave fénix que aparece también en todas las publicaciones de la editorial Muntaner y Simón.
Domenech i Montaner modernizó el sector editorial de Barcelona, entronizó este mundo tipográfico catalán en el mundo europeo. El 70% de la producción era de autores extranjeros. Al mismo tiempo la relación de Lluís Domenech i Montaner con los autores era directa, por carta. También era directo el trato que tiene con los ilustradores. En una de las obras participaron 14 ilustradores. Él no sólo dirigía la colección sino que también era ilustrador. Hacía el esbozo y luego el grabador trasladaba el diseño a la cubierta final.
Son obras de arte aunque la encuadernación se hiciera de forma industrial: 30.000 volúmenes realizados con un proceso industrial muy digno. Había equilibrio entre la producción industrial y la calidad artesanal. Finalmente el proyecto acabó en manos de otros impresores.
En 1878 realiza la cubierta de ‘La Atlàntida’ y la de ‘El Canigó’ de Mossèn Cinto Verdaguer. Una obra en la que pone todos sus conocimientos de impresor y encuadernador es la ‘Historia General del Arte’, publicada en fascículos por la editorial Domenech i Montaner, encargo que le hizo su tío. Esta colección duró varios años. Cada dos años salía uno de los volúmenes y cada lomo era diferente.
El éxito de la Exposición Universal de Barcelona (1888) fue el trampolín que situó a Domenech i Montaner en el epicentro de la arquitectura catalana. El arquitecto encuentra aquellas complicidades que le faltaban tanto para proyectos puntuales como para obras de lujo. Su último diseño de una cubierta fue el de una edición de ‘El Quijote’ que se hizo en papel de corcho tanto la cubierta como las páginas interiores.
Impulsor de la edición del libro modernista en Catalunya, su etapa dedicada al mundo editorial traspasa toda su estética a la arquitectura. Las obras del arquitecto son siempre un libro abierto de par en par. El ave fénix que aparece en las guardas de sus libros aparece también reproducida en muchos de sus edificios».
En la exposición hemos podido admirar un ejemplar de encuadernación renacentista del año 1527, ejemplos de encuadernaciones de la época modernista en Catalunya realizadas por Hermenegildo Miralles y las más recientes encuadernaciones artísticas contemporáneas.
Leonor Sedó
Barcelona, 23-04-2016
Imagen principal:
Encuadernación de Antoine-Michel-Padeloup – Imágenes gentileza de Josep Cambras