‘El florido pensil’ – La educación de la España franquista
‘El florido pensil’ recrea el sistema educativo de la posguerra española, con una metodología tradicional, basada en el dogmatismo, la imposición de la autoridad mediante la disciplina y la adquisición rutinaria de los conocimientos por memorización.
[Cultura – Literatura / Familia – Niños]
Nos encontramos con un libro: ‘El florido pensil’* (título completo ‘El florido pensil. Memoria de la escuela nacionalcatólica’), editado por Crítica en 1994. Un libro perdido en nuestra biblioteca que se compró en su día porque nos lo recomendó un amigo y que se quedó allí sepultado por otros de compra posterior.
En 2004 nos trasladamos de piso y volvió a pasar por nuestras manos y quedó ‘aparcado’ en la estantería de libros para leer.
Y este mes de agosto de 2024, por fin fue leído. Fue redescubierto, aplaudido, recomendado y sobre todo, fue un recordatorio de lo que vivieron miles de niños españoles que tuvieron que aceptar explicaciones ilógicas sobre historia, religión, cálculo y mucho más.
El libro y su autor
‘El florido pensil’ de Andrés Sopeña Monsalve, licenciado y doctorado en Derecho por la Universidad de Granada, ensayista, guionista de cómic, narrador, columnista de prensa y especialista en comunicación social, está brillantemente prologado por Gregorio Cámara Villar, catedrático de Derecho Constitucional de la misma universidad.
Es un ensayo en clave de humor e inteligente ironía, sobre la educación de varias generaciones de españoles en la escuela de la España franquista.
Una recreación del sistema educativo de la posguerra española, identificado con la ideología nacionalcatólica del primer franquismo, con una metodología tradicional, basada en el dogmatismo, la imposición de la autoridad mediante la disciplina y la adquisición rutinaria de los conocimientos por memorización, sin permitir la más mínima posibilidad de cuestionamiento ni crítica.
La obra también nos habla de las radionovelas, los tebeos ‘pringados’ que se alquilaban como los de Roberto Alcázar, o el cine de los jueves, siempre precedida la película de documentales con Franco inaugurando pantanos.
Un éxito editorial
El libro, a los pocos días de llegar a las librerías, ya ocupaba el lugar más destacado en ventas, manteniéndose durante muchos meses como el libro más popular entre los lectores españoles.
‘El florido pensil’ constituyó todo un fenómeno editorial en la reciente historia de la literatura española, y ha tenido posteriormente multitud de reediciones, tanto en formato habitual como de bolsillo.
Fue adaptado al teatro por el Grupo Tantakka (1996), con más de dos mil representaciones y enorme éxito de público. En 2002 fue llevado al cine por el director Juan José Porto.
Andrés Sopeña Monsalve también ha escrito ‘La morena de la copla’ (Editorial Crítica, 1996); ‘Tente iracundo otomano’, (Editorial Plaza y Janés, 2001); ‘Un no sé qué de agradable en las flores de plástico’ (Ediciones Dauro, 2003), sin olvidar el cómic ‘Gaudeamus’ (Editorial Grijalbo, 1999).
La escuela
«La mentalidad -el talante, si se prefiere- de una sociedad, la manera que ésta tiene de entender y de afrontar la realidad, no es ajena a su pasado, menos, a las estrategias que en ese pasado articularon el complejo entramado de dominio, legitimización, imposición y reproducción que es la escuela.
La práctica pedagógica es, siempre, instrumento básico de socialización: es, siempre -y entiéndase como se quiera-, una ‘violencia’ sobre las conciencias.
Por demás está recordar ahora que la enseñanza primaria obligatoria -período y ámbito a los que se circunscribe el presente trabajo- reúne a la práctica totalidad de los individuos de cada generación en el momento más receptivo y menos crítico de toda su existencia». (‘El florido pencil’, pág. 228).
Lo ilógico
No importaba en absoluto que los niños comprendieran lo que se les dictaba. Por ejemplo, explicaba el maestro que el Padre es Dios, el Hijo es Dios y el Espíritu Santo es Dios.
Los niños suman que son tres dioses, pero… les explican que son sólo uno. La confusión se apodera de las criaturas y, aún se acentúa más cuando el maestro les enseña que una se representaba por un triángulo con un ojo, otra por una paloma (a veces con un ramito de olivo y a veces no), y la otra tenía forma de corazón unas veces y, otras, de corderito.
En historia, por ejemplo, les explicaba el maestro lo buenos que eran los Reyes Católicos y que habían echado a los judíos de España porque eran «espías y conspiradores políticos: que vivían en la secreta amistad con los moros y en callada esperanza de los turcos… que habían preparado crímenes horribles», y que habían fundado la Santa Inquisición para ponerlos en vereda.
También echaron a los moros que llevaban ocho siglos en España y habían venido porque «Les gustaba mucho España y tenían muchas ganas de ser los amos de nuestros pueblos, de nuestros campos, de nuestros montes, de nuestros mares» (según leía el profesor).
Las guerras
Ya no digamos las explicaciones que les dieron a las criaturas referentes a la conquista de América: «España no sólo descubrió América, sino que la conquisto, cristianizó y civilizó, en casi su totalidad, constituyendo este hecho una epopeya tan grandiosa que raya en lo inconcebible».
Nada les contaron sobre que la conquista hispana de América fue, como otras grandes invasiones, una de las páginas más sangrientas de la historia de la Humanidad. (‘Las invasión de América’ de Antonio Espino).
Sobre el Alzamiento Nacional, la explicación: «En España había ya muchos socialistas y muchos masones y muy poco temor de Dios. Los socialistas excitaban a los pobres contra los ricos. Los masones querían que hubiera revolución». Los niños de ocho y nueve años no entendían qué eran socialistas y qué eran masones.
Y con respecto a la bandera: «La bandera es el tesoro que los españoles muertos nos dejaron como herencia para su custodia […] Por eso es una gloria morir por ella y un deber sagrado honrarla y defenderla».
Conclusión
Estas generaciones de niños y niñas (a las niñas se les enseñaban las ‘labores del hogar’: cocinar, coser, bordar y cómo cuidar a los niños, incluyendo la preparación de una canastilla para el recién nacido) han vivido sin conocer la verdadera historia tanto de España como de fuera de ella, tanto de religión como de política.
Algunos de ellos, de adultos, investigaron por su cuenta leyendo libros que estaban prohibidos en España y se podían encontrar en Francia, México o Argentina.
La mayoría se quedó con la ‘copla’ que les contaron en el colegio y la trasladaron a sus hijos y, aún hoy, se puede encontrar a personas que creen ‘a pies juntillas’ las versiones vertidas por esta escuela de posguerra que cuenta Andrés Sopeña.
No sólo son personas que no han accedido a una enseñanza superior, las que creen en ello, sino que incluso personajes con altos cargos y con estudios universitarios lanzan ‘discursos’, por ejemplo, sobre la conquista de América y el ‘legado español’, que dejan sin aliento.
‘El legado español’
«España fue a llevar el español (para qué lo necesitaban si ya tenían sus idiomas) y, a través de las misiones, el catolicismo (que tampoco lo necesitaban para nada) y, por tanto, la civilización (ya tenían la suya) y la libertad (?) al continente americano». (noticiaslatam.lat, 29-09-2021)
Se llenan la boca con ‘el legado español’ que los españoles dejaron en Latinoamerica, cuando en realidad este legado fue de múltiples enfermedades, de horror, de crueldad, de extorsión, saqueo, asesinatos, esclavitud y violaciones. No olvidemos que la gente que se reclutó como marineros y para trabajos varios de la expedición eran lo peor de las prisiones españolas.
Si bien es cierto que las tribus indígenas guerreaban entre ellas, dejando muertos en las contiendas, la conquista española del continente americano dejó millones de indígenas muertos.
Para muchos de nosotros no fue ‘una gesta ejemplar’, no fue un espejo donde mirarse. Fue una guerra sangrienta y cruel y cabría reconocerlo.
Apunte:
En Estados Unidos el presidente Joe Biden proclamó, el 11 de noviembre de 2021, el cambio de la festividad del Día de Colón (Columbus Day) por el Día de los Pueblos Indígenas.
“Hoy, reconocemos también la dolorosa historia de atrocidades y daños que muchos exploradores europeos infligieron a las naciones tribales y a las comunidades indígenas”, escribió Biden. (diarioconvos.com, 11-11-2021).
L. Sedó
eMagazine 39ymas.com
Origen de las imágenes:
principal: historiayficcion.com
Andrés Sopeña: laantiguabiblos.blogspot.com
portada libro
historiayficcion.com
herodotoycia.com – Escuela femenina en Higuera de la Sierra (Huelva) en 1962: Heródoto & Cía
goldatu.euspildoresdefe.net (imagen recogida de los internados del miedo)
pildorasdefe.net
Los Reyes Católicos: blogs.udima.es
Portadas libros prohibidos
laizquierdadiario.com
Ver:
> Antonio Espino – ‘La invasión de América’ – Una conquista terriblemente sangrienta
> Eudald Carbonell – «Nuestra especie entra en colapso»
> Pere Puigdomènech – Autor de ‘Desafíos del futuro’
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* El título está inspirado en un verso de la letra del Himno de España que aparece en la Enciclopedia Álvarez, de autoría desconocida:
«Fuiste de glorias florido pensil
hoy reverdecen a un impulso juvenil»
‘Pensil’ o ‘pénsil’ (el Diccionario de la Real Academia Española acepta las dos acentuaciones) procede del latín ‘pensĭlis’ (colgante: que cuelga, pende o está suspendido en el aire) que se aplica especialmente a los jardines (por referencia histórica a los jardines colgantes de Babilonia).