Mónica Terribas – «El objetivo del periodismo es perseguir la objetividad»
Ateneu Barcelonés, Sala de Actos ‘Oriol Bohigas’, Barcelona
Entrevista a Mónica Terribas, periodista
30 de noviembre de 2015
Fotografías: ©2015 Marisa Ferrer P.
La sala Oriol Bohigas, del Ateneu Barcelonés está al completo cuando aparece en el escenario M. Àngels Cabré, escritora y directora del Observatori Cultural de Gènere (Observatorio Cultural de Género), acompañada de la popular periodista Mónica Terribas quien, con su habitual desenvoltura, no ha dudado en responder cumplidamente las preguntas formuladas sobre su trayectoria profesional, en la última de las entrevistas que han formado el ciclo ‘Ulls de dona (Con ojos de mujer)‘.
Después de los agradecimientos debidos y de una sucinta presentación, apenas necesaria por ser la invitada de todos conocida, se inicia el diálogo abordando en primer lugar la influencia de las nuevas tecnologías en el periodismo, que permiten a la mayoría de ciudadanos opinar sobre las noticias. En la actualidad es habitual que ningún personaje público, en especial los políticos, escape de la lupa de quienes tienen la facilidad de dar su opinión sobre cuanto ven u oyen respecto a sus actividades, y los dejan expuestos a la luz de los focos y a los flashes de las cámaras, siendo a menudo objeto de críticas airadas o comentarios demoledores. La periodista, que se incluye dentro de esa categoría de profesionales con actividades públicas, ha roto una lanza en favor de los que padecen ese asedio permanente, manifestando en tono humorístico su curiosidad por ver cómo afectará a los políticos noveles unos años de exposición a esas presiones.
Ha elogiado a la ciudadanía de este país por su alto sentido de la responsabilidad cívica cuando, a pesar de poder sentirse decepcionado en ocasiones por las deficiencias en el ámbito político, no por ello pierde su conexión con las raíces democráticas, sin dejar de interesarse y dar su parecer sobre cualquier acontecimiento.
Fotografías: ©2015 Marisa Ferrer P.
Ha señalado la importancia de la responsabilidad de los componentes de esta sociedad, pues gracias a su implicación desinteresada en organizaciones pequeñas y medianas de asistencia, como el Banco de Alimentos, por poner un ejemplo, evitan la desestabilización que supondría una larga crisis que ha colocado a un 20% de la población en riesgo de exclusión social y a la falta de ingresos en 200 000 hogares.
En respuesta a otra de las preguntas, Mónica Terribas, ha hablado del deber de los medios de comunicación de tratar, diariamente si es necesario, las noticias derivadas de las situaciones por las que atraviesa el país en cada momento, aun a riesgo de ser reiterativos, sobre todo cuando se trata de circunstancias excepcionales, como es el caso en la actualidad de la situación política, igual que años atrás lo fue la situación económica, cuando cada mañana el ciudadano era informado sobre la prima de riesgo y sus altibajos diarios. Ha rememorado las muchas entrevistas encauzadas hacia temas económicos cuando dirigía el programa nocturno La Nit al Día porque en aquellos momentos era el asunto que preocupaba a la población.
Después de los seis años que mantuvo ese programa nocturno de noticias, fue designada directora de la cadena de televisión de Cataluña, TV3, cargo ostentado durante cuatro años, para pasar a continuación a desempeñar el de consejera delegada del diario Ara, etapa que duró un año. Desde entonces hasta la fecha conduce un programa matinal de noticias en Catalunya Radio.
Llegados a este punto, ha sido inevitable la pregunta sobre las diferencias entre trabajar en uno u otro medio. Su respuesta, en lenguaje coloquial y salpicada de anécdotas y parábolas, ha dejado claras esas diferencias, empezando por la hora de maquillaje previo que requiere un programa de televisión, la preparación de entrevistadores y entrevistados o las situaciones comprometidas en los casos de emisión en directo por la pequeña pantalla, que en ocasiones la han obligado a imponerse para recuperar el control del coloquio.
Fotografías: ©2015 Marisa Ferrer P.
Por lo que se refiere a los medios escritos, ha convenido con la entrevistadora en el cambio de función. El lector actual va a buscar en la prensa escrita los artículos de fondo, o los reportajes de enviados especiales o las firmas de aquellos que merecen su confianza a la hora de interpretar las noticias que ya han sido difundidas por radio y televisión antes de su aparición en papel impreso, e incluso contrastadas por el propio lector utilizando los medios alternativos a su alcance.
En cuanto a la radio, obviamente no exige una preparación tan laboriosa y, en el caso de un programa tan largo como el suyo, la variedad es quizá lo que más ha resaltado. Puede hacer entrevistas a personajes de cualquier ámbito, puede aprender a cocinar con un chef, para después hablar de música o de teatro, para pasar a un tema político o científico.
Prefiere las entrevistas a los debates, le gusta intentar introducirse en el cerebro de quien tiene delante para entender bien lo que quiere decir y transmitirlo de la manera más clara posible a los que escuchan.
Es consciente de las diferencias que aun se dan entre profesionales masculinos y femeninos. Mientras siga siendo noticia que una mujer llegue a un alto cargo o si lleva permanente o tacones altos, la cosa no ha mejorado ¿Por qué a ella se la califica de incisiva, cuando preguntas similares son hechas por hombres sin que nadie se asombre? En su opinión, queda mucho camino por recorrer en ese sentido y aunque la aburre la cuestión, por el momento hay que aceptarla como es.
¿Cuál debería ser el objetivo del periodismo? La rápida respuesta: perseguir la objetividad.
Esta es una de las cosas en las que insiste a sus alumnos universitarios. El ángulo de visión a la hora de informar sobre un hecho puede cambiar, pero lo que no se puede hacer nunca es faltar a la verdad.
Cree que la aportación del periodista al tratamiento de una noticia es la mirada sobre la complejidad de la realidad; se debe poner el foco en las zonas oscuras, aquellas que quedan en un segundo plano pero que exigen un mejor detalle para comprender, para conectar de una manera coherente con lo que se sabe o lo que se dice.
Dice que el espacio público está cada vez más condicionado por los intereses económicos y que pivota más sobre las habilidades comunicativas que sobre los contenidos. Se pregunta a menudo si el mundo informativo que se está construyendo se corresponde con la sociedad real.
Se considera afortunada por haber conocido a los profesionales que la iniciaron en su andadura profesional, por haber pasado por la universidad y aprender a pensar, a estructurar las ideas. Para ella ha sido y espera que lo sea también para todos los jóvenes, una época propicia para cuestionarse cosas, para profundizar en cuanto se aprende y formarse opiniones propias.
Fotografías: ©2015 Marisa Ferrer P.
Le preocupa el modo cómo se está utilizando el espacio público, ese lugar formado por los medios y ahora las redes sociales, que sirve para la comunicación entre ciudadanos y si nosotros, como sociedad, seremos capaces de definir cómo queremos ser a través de él.
Acaba la entrevista aportando su punto de vista sobre el tratamiento que se da a las personas discapacitadas, que considera no son todavía sujetos plenamente aceptados de nuestra sociedad y mientras eso no se consiga no se podrá hablar de igualdad, produciendo con sus palabras un aplauso espontáneo del público.
A la última pregunta contesta no sentirse feminista en el sentido de ser militante; sus decisiones profesionales no han sido consecuencia de ser mujer, sino de su convicción de tener capacidad de aportar algo a la labor encomendada, añadiendo que si hacemos las cosas por militancia, acabaremos siendo esclavos de ella y cree que eso no nos debe arrastrar.
Los aplausos han acompañado el final de esta larga entrevista efectuada a esta profesional acostumbrada a estar al otro lado del micrófono, que ha sabido conjugar sus obligaciones familiares con las profesionales, como tantas otras mujeres de hoy, sin darle mayor importancia, y que renunció a ser economista para dedicarse a informar.
Marisa Ferrer P.
Barcelona, 30-11-2015