Plácido Domingo en Barcelona – 50 años de su debut en el Liceo
[Barcelona Eventos / Cultura – Música]
Auditorio Fundación RBA, Barcelona
Màrius Carol entrevista a Plácido Domingo con ocasión de los 50 años de su debut en el Liceo.
27 de abril de 2016
Fotografías: ©2016 SHIRA
Con ocasión de los 50 años de su debut en el Liceo de Barcelona, del famosísimo cantante de ópera Plácido Domingo, la Fundación RBA ha querido rendir su especial homenaje al cantante organizando una entrevista a cargo del periodista Màrius Carol, director de La Vanguardia.
Con el Auditorio de la Fundación completamente lleno de admiradores de Plácido Domingo, que además de cantante de ópera es director de orquesta, faceta poco conocida por los neófitos de la ópera, Màrius Carol ha hecho referencia a los 80 minutos de aplausos ininterrumpidos (1 hora y 20 minutos) que le dedicó, en el año 1991, el público de la Ópera Estatal de Viena después de finalizar la obra de Verdi, Otello. En aquella ocasión el tenor salió a escena 101 veces.
Fotografías: ©2016 SHIRA
“Después de los 80 minutos, ¿qué pensaste?”, le pregunta el periodista.
“No sabes qué hacer, ves que el público está contento. Después de más de una hora saliendo, lo empezamos a tomar a broma. La gente no quería irse y cuando iba por la salida 72, me senté en el foro de la orquesta y les empecé a hablar”.
Durante este mes de abril, el Liceo de Barcelona, acoge la celebración especial de los 50 años del debut de Plácido Domingo, que actúa en Simon Boccanegra, de Verdi. La producción de la obra corre a cargo del Liceo y el Grand Théâtre de Ginebra.
Durante estos días que el cantante está en Barcelona está recibiendo diversos homenajes. “Me estoy reencontrando con amigos y melómanos que conozco desde hace más de 40 años y más de 20. También he paseado por donde estuve viviendo en mi época de Barcelona”, comparte el cantante con el público asistente.
Carol se interesa por cómo consigue Plácido Domingo mantener la voz después de 50 años.
Fotografía: ©2016 SHIRA
“Empecé de barítono en zarzuela, que es más agudo que en la ópera. A diferencia de otros tenores como Pavorotti, yo tenía que trabajar mucho para lograr la tesitura de tenor. Esto me hizo mantener una técnica aceptable como tenor. Ahora me siento con la voz como la que tenía antes de la tesitura de tenor”, aclara Plácido Domingo.
El periodista recuerda un episodio en el que Josep Carreras, después de haber regresado de Seattle fue, a escondidas, al Liceo a escuchar a Plácido Domingo y éste, en el entreacto lo fue a buscar y lo hizo salir a escena. “A la gente se le saltaron las lágrimas de manera espontánea”, relata.
“No se puede olvidar. Este artista joven que tuvo esta terrible enfermedad (leucemia linfoblástica) y que estuvo un año en Seattle en tratamiento. Lo vi en el palco y lo fui a buscar”, rememora el cantante.
“En Wikipedia te citan cuatro profesiones: cantante, director de orquesta, productor y compositor. ¿Tú qué te pondrías?», le pregunta Màrius Carol.
“Yo soy cantante básicamente, aunque empecé estudiando piano. Como director de orquesta he dirigido 600 obras. Marta me dice que tengo facilidad para componer pero nunca lo he intentado. Mi hijo Plácido, en cambio, sí que es un gran compositor”, aclara Plácido Domingo.
Los padres de Plácido, cantantes de zarzuela, eran conocidos internacionalmente. Cuando Plácido tenía ocho años se trasladaron a Ciudad de México y es allí donde estudió piano y dirección de orquesta. También intentó ser futbolista profesional.
El cantante agradece a sus padres haberle dado “la doble vida”: la vida y la música.
Fotografía: ©2016 SHIRA
“La ópera ha mejorado mucho teatralmente. Los cantantes tienen que ser buenos actores y esto ha aumentado la calidad de las obras”, pone de manifiesto el periodista.
“Los cantantes de ópera empezaron que no se movían, después, poco a poco, se dieron cuenta de que a un personaje hay que sentirlo. Una obra no sólo tiene la elocución y la parte vocal. El texto que estás cantando tiene que llegar al público. Se siente al cantante que expresa y al que no” .
El cantante afirma que nunca ha discutido con ninguna soprano, que si hay momentos difíciles o personas difíciles, el dice: “vamos a analizar”, y funciona. Está convencido de que el divismo está desapareciendo. Cree que en el repertorio contemporáneo pueden surgir obras interesantes, que incluso son necesarias; pero ese repertorio no se puede decir que sea el futuro de la ópera. «Las obras desde el periodo barroco, clásico, italiano; el repertorio francés y wagneriano, vivirán para siempre”.
Ha recordado cuando formó parte del trío Los tres tenores, que por cierto fue idea suya, junto a Josep Carreras y Luciano Pavarotti. “Pavorotti viajaba en su avión privado con cocinero, mortadelas y sandías. A veces, en el hotel, nos cocinaba magníficos platos de pasta”.
Fotografías: ©2016 Leonor Sedó
Màrius Carol le pregunta si es supersticioso.
“No lo soy porque trae mala suerte. Bien, algo que hago siempre cuando termino las actuaciones en un teatro, cuando ya no hay nadie, me pongo de rodillas y canto una frase de lo que cantaré la próxima vez que vuelva a actuar en él (que ya lo sé por los contratos firmados)«.
Al finalizar la entrevista se ha servido un cóctel-cena obra del chef con estrella Michelín Nandu Jubany, donde se ha podido conversar y cambiar impresiones con los asistentes, conocidos personajes del mundo cultural de la ciudad condal, políticos, representantes de medios de comunicación y melómanos fervientes admiradores del cantante.
Leonor Sedó
Barcelona, 27-04-2016
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