Rebecca West – Su infancia volátil en ‘La familia Aubrey’

 

[Cultura – Literatura / Mujeres Hoy

 

Rebecca West, autora de La familia Aubrey, fue intolerante con las convenciones, apasionada defensora de la condición femenina, admiradora de D. H. Lawrence e interesada por las innovaciones estilísticas de Ford Madox Ford.

Fue aclamada como la mujer de letras más importante de su tiempo, llegando a ser nombrada Dama del Imperio Británico. Amiga de Virginia Woolf y de Doris Lessing, fue una feminista muy peculiar y una verdadera adelantada a su tiempo: sufragista, escritora y periodista con una carrera plagada de éxitos que la llevó a cubrir, para las cabeceras más prestigiosas, desde los juicios de Núremberg hasta el Apartheid.

La familia Aubrey, es el primer volumen de una trilogía bestseller de los años cincuenta que se publica por primera vez en castellano de la mano de la editorial Seix y Barral.

 

La novela

La talentosa y excéntrica familia Aubrey rara vez disfruta de un momento de armonía, en una lucha constante por minimizar la inestabilidad de un padre, Piers, que igual escribe artículos de manera febril en su despacho durante horas que vende los pocos muebles que les quedaban para apoyar alguna causa alocada y abocada al fracaso.

Pero su nuevo trabajo en las afueras de Londres promete, al menos durante un tiempo, el alivio del escándalo y la amenaza de la ruina. La madre, una ex pianista, lucha por mantener a la familia a flote, pero lo cierto es que ella es tanto o más excéntrica que su marido. Al menos así la ve Rose, una de las tres hijas de la familia, a través de sus ojos de niña a veces amorosos, a veces crueles.

Tanto ella como su hermana gemela, Mary, son prodigios al piano. La familia se completa con Cordelia, la hermana mayor —trágicamente privada de talento musical— y Richard Quin, el pequeño de la casa.

En La familia Aubrey, Rebecca West transformó su propia infancia volátil en un arte perdurable. Es este un retrato sin adornos pero afectuoso de una familia extraordinaria, en el que la autora se valió de un notable estilo y una poderosa inteligencia para analizar los límites evasivos de la niñez y la edad adulta, la libertad y la dependencia, lo ordinario y lo oculto.

 

La escritora

Rebecca West, cuyo nombre verdadero era Cecily Isabel Fairfield, nació en Irlanda en 1892. Su madre era pianista y su padre, periodista y mujeriego sin remedio, abandonó a mujer e hijas en 1901.

La madre y las tres hermanas se trasladaron a Edimburgo donde Cecily empezó sus estudios que tuvo que dejar al enfermar de tuberculosis. Desde entonces su formación fue autodidacta.

Adoptó el pseudónimo de ‘Rebecca West’ (un personaje de Ibsen) durante 1910-1911, periodo en el que asistió a un curso de Arte Dramático.

En 1911 empezó su carrera como columnista de un semanario sufragista, luego trabajó en el Daily News y en el periódico socialista The Clarion.

Colaboró como portavoz de los ideales socialistas y feministas en The New Yorker, The New Republic, Sunday Telegraph y New York Herald Tribune; y fue corresponsal en The Bookman.

Sus libros

En 1918 publica El regreso del soldado, donde analiza los efectos de la neurosis de guerra en los soldados que volvieron del frente tras servir en la Primera Guerra Mundial. En 1922, El juez, donde refleja su militancia feminista y aborda temas tan conflictivos en la época como la violación o las circunstancias sociales de las madres solteras.

Escribió ensayos sobre Henry James (1915), D.H. Lawrence (1930), San Agustín (1933) y Marshall McLuhan (1969). Una de sus principales obras ensayísticas, Cordero blanco, halcón gris (1941), es un estudio sobre Yugoslavia y una crítica del nazismo.

En 1947 se publicó El significado de la traición (1947), una compilación de los reportajes que escribió para la revista New Yorker sobre los juicios por traición de los británicos tras la Segunda Guerra Mundial (1939-1945); A train of powder (1955), un libro sobre el juicio de Nuremberg, y novelas como Harriet Hume (1929), La fuente rebosante (1957) y Los pájaros se caen (1966).

 

Su vida personal

En septiembre 1912, Rebecca West inició una íntima amistad con el escritor H. G. Wells (paradójicamente, a raíz de una crítica corrosiva escrita contra él); ambos escritores se hicieron amantes a finales de 1913. De esa relación nació Anthony West, el 4 de agosto 1914. Aunque su romance duró diez años, su amistad duró hasta la muerte de Wells en 1946.

En 1930, con 37 años, Rebecca West se casó con el banquero Henry Maxwell Andrews, con el que permaneció hasta su muerte en 1968, año en que ella regresó a Europa, instalándose en Londres. En 1983 murió con noventa años tras una larga enfermedad.

 

Lo que dice la prensa

Rebecca West fue una de las gigantes del Olimpo de la literatura inglesa y tendrá un lugar allí para siempre. Nadie en este siglo ha usado una prosa más deslumbrante, ha tenido más espíritu o ha observado las tortuosidades del carácter humano y los aspectos del mundo de un modo más inteligente”, The New Yorker.

“La pluma de Rebecca West era tan brillante como la mía, pero más salvaje”, George Bernard Shaw.

La familia Aubrey es uno de los mejores libros escritos en el siglo XX. Me refiero al sonido que emite el libro, su peso en la memoria, su forma de acomodarse en el tiempo, sus colores, su forma de espolear la imaginación del lector”, Alessandro Baricco.

“Es improbable que hasta el lector más escrupuloso pueda nombrar una historia más conmovedora y amorosamente escrita, una pieza de escritura más bella”, The New York Times.

“En La familia Aubrey los dones de West como escritora se combinan con la imaginación y una nostalgia cuidadosamente controlada para crear una novela que recuerda al mejor Dickens”, The Washington Post.

“Lo poco que sé de la belleza, y del deleite, se lo debo a Rebecca West”, Andrea Marcolongo, La Stampa.

«La familia Aubrey es un libro lleno de amor y vitalidad”, Daily Express.

“Una de las novelas más interesantes y cautivadoras sobre la infancia y la familia que se han escrito jamás”, Amanda Craig.

“Sus temas son tan vívidos y amables, una familia literaria y musical en crisis, que terminar el libro es sufrir un duelo”, Mail on Sunday.

 

Departamento de Comunicación
Seix Barral – Grupo Planeta 
Anna Portabella – aportabella@planeta.es
Patricia Jiménez – pjimenezl@planeta.es

Otras fuentes:
Wikipedia

Imágenes cedidas por el Departamento de Comunicacion de Seix Barral

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