Técnica de limpieza de cutis – Para mantener la piel joven

Una limpieza de cutis a fondo en manos de una profesional, una o dos veces al año, dejará la piel en perfectas condiciones para afrontar los cambios de tiempo, la polución de las ciudades o diferentes problemas del medio ambiente. El resto del año podemos realizar limpiezas de cutis nosotras mismas de forma regular.

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Las limpiezas de cutis son indispensables para mantener la piel joven, suave y aterciopelada. Una limpieza de cutis a fondo en manos de una profesional, una o dos veces al año, dejará la piel en perfectas condiciones para afrontar los cambios de tiempo, la polución de las ciudades o diferentes problemas del medio ambiente.

El resto del año podemos realizar limpiezas de cutis nosotras mismas de forma regular –cada 15 días, si la piel es normal o seca, y una vez a la semana si la piel es grasa o con problemas- para mantener el rostro bello.

Limpieza cutis profesional

Si la limpieza la realiza una profesional seguirá los siguientes pasos:

> Estudiar el cutis.

> Desmaquillar los ojos, los labios y cara con leche limpiadora. La leche se retira con esponjas húmedas aplicando a continuación el tónico aplicado con algodón.

> Depilar cejas, labio superior y barbilla.

> Poner crema de sudación.

> Aplicar vapor de ozono de 5 a 10 minutos.

> Pasar la ventosa.

> Quitar puntos negros, espinillas, etcétera.

> Pasar los electrodos de cara (rojo: calma, violeta: desinfecta y cicatriza).

> Masaje facial con crema nutritiva según el tipo de piel.

> Pasar el electrodo (alta frecuencia) con forma de horquilla por el cuello.

> Aplicar ducha filiforme (pulverizaciones tipo lluvia).

> Poner los tratamientos especiales si han sido solicitados.

> Poner la mascarilla adecuada al tipo de piel.

> Retirarla.

> Pulverización o ducha fría.

> Aplicar la crema base adecuada al tipo de piel.

Limpieza de cutis casera

Si la limpieza se realiza en casa se hará lo siguiente:

> Dejar la cara despejada, recogiendo el pelo o colocándose una banda ancha.

> Depilar, si es necesario, labio superior y barbilla.

> Repasar las cejas con unas pinzas.

> Extender por el rostro leche limpiadora con un masaje suave para favorecer su penetración.

> Poner la cara al vapor del agua  hirviendo (previamente se habrá colocado una olla con agua y hierbas aromáticas –a elegir entre: tila, salvia, manzanilla o menta- hasta que hierba) durante 5 o 10 minutos, tapando la cabeza con una toalla para que los poros se abran más fácilmente.

> Eliminar las espinillas y puntos negros presionando con suavidad a su alrededor con gasas estériles o algodón.

> Retirar los restos de leche limpiadora.

> Aplicar el tónico adecuado.

> Poner la mascarilla adecuada al tipo de piel.

> Retirarla con una infusión tibia (se puede usar el agua que se ha utilizado en el vapor).

> Aplicar una ducha fría o cubitos de hielo.

> Poner crema base.

Limpieza rápida en casa 

> Hervir un litro de agua y poner en ella dos cucharadas soperas de bicarbonato.

> Aplicar una crema hidratante.

> Con una brocha de afeitar de cerda, ir mojándola en el agua con bicarbonato y, realizar un masaje con movimientos rotativos durante unos cinco minutos.

> Aclarar con agua bien fría o cubitos de hielo.

> Extender yogurt natural (que cierra los poros) sobre el rostro dejándolo actuar quince minutos.
Retirar también con agua bien fría.

> Aplicar crema base.
 

Tónico

Una buena limpieza de cutis no es tal sin la aplicación de un buen tónico para cerrar los poros de la piel impidiendo que la suciedad se deposite en ellos. También refresca el cutis, fortalece y reafirma los tejidos.

Escoger el tónico según el tipo de piel:

> Astringente, para pieles grasas.

> Sin alcohol, si la piel es mixta, seca o sensible.

Modo de uso:

Después de retirar la leche limpiadora, aplicar enseguida el tónico adecuado con un algodón, dando suaves golpecitos, por todo el rostro y cuello.

De esta forma la piel del cutis queda preparada para asimilar cualquier tipo de crema de tratamiento doblando sus efectos.

Crema base

Para poner una protección contra el polvo y las impurezas que obstruyen los poros e impiden una buena respiración de la piel, para permitir que resista a los cambios de temperatura y de los maquillajes, es imprescindible usar una crema base invisible y protectora.

Existen dos tipos de cremas base:

> Base hidratante para piel seca

> Base hidratante para piel normal y grasa.

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© Leonor Sedó
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Ver:

> Piel sensible, deshidratada, normal, seca, grasa o mixta  
> La piel – Cuidados básicos del cutis   
> Bótox – Belleza del cutis y del pelo   
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Actualizado: 06-06-2024
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